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¿Sabías que los seguros de decesos son de los tipos de pólizas que más se contratan en España? Se trata de un producto que, si nos lo tomamos con humor, tarde o temprano se va a acabar utilizando sí o sí. Por tanto, si partimos de esa afirmación, ya estaría mereciendo la pena disponer de un seguro de decesos. 

Si a eso le sumamos lo fácil que se lo pondremos a nuestros familiares en el momento de hacer frente a nuestra despedida, los argumentos a su favor son irrefutables. Ahora bien, ¿cuánto cuestan? ¿Es una póliza cara?  Lo resolvemos en este artículo.

Antes de comenzar a profundizar en el tema que nos preocupa, es importante hablar en este punto sobre el seguro de vida ya que, dependiendo de la compañía aseguradora y del tipo de póliza de vida que se haya elegido, podemos encontrarnos con que alguna de las coberturas incluidas en el seguro de decesos está ya recogidas en nuestro seguro de vida.

Por tanto, contratando un seguro de decesos estaríamos duplicando la misma cobertura, una situación que se da con mucha más frecuencia de la que pensamos. Por ello, antes de contratar un nuevo seguro, sea del tipo que sea, siempre es conveniente revisar las coberturas de los seguros que ya tenemos, para evitar pagar dos veces el mismo servicio. Además, también podemos ampliar las coberturas de un seguro en lugar de contratar uno desde cero. Ambas opciones son igual de útiles.

¿Cuánto cuesta un seguro de decesos?

Un seguro de decesos tiene como objetivo cubrir los gastos relacionados con una defunción. En ese caso, en función de las necesidades y preferencias de cada persona, el gasto total a cubrir podría partir de los 3.000 euros alcanzando los 6.000 u 8.000 euros aproximadamente en España, aunque puede darse el caso de resultar más caro.  Aún así no es lo más común.

Así las cosas, la cuota a pagar (de forma mensual, trimestral o anual según lo acordado con la aseguradora o dependiendo del tipo de póliza) no será demasiado alta, ya que el total asegurado se dividirá en una cifra determinada de meses o años.

A grandes rasgos, el punto de partida de una cuota mensual puede ser desde 6 o 7 euros. La media de coste anual en España oscila alrededor de los 70 a 120 euros al año.  Es más, en muchos casos, el tomador paga más de lo que costará el sepelio y la compañía aseguradora tendrá que devolver el importe restante, en el caso de que así figure en el contrato de seguro.

El importe varía en función de los baremos previamente fijados y podrá ser diferente entre unas compañías u otras, igual que si se decide contemplar como una cobertura añadida al seguro de vida o seguro de accidentes. Cada persona elegirá siempre la opción que más le convenga, y por eso siempre recordamos la importancia que tiene el proceso previo de búsqueda y comparación de pólizas. Además de ayudarnos a elegir la mejor opción, podremos encontrar la más asequible y completa. Las prisas, a la hora de elegir una póliza de seguros, no son buenas, así que invierte siempre el tiempo que necesites.

¿Cómo se calcula el precio de un seguro de decesos?

Para calcular el precio de un seguro de decesos hay que tener en cuenta diversos factores entre los que podemos señalar:

  • Edad del interesado o interesados en pólizas de carácter familiar.
  • Datos relacionados con su salud y patologías previas.
  • Localidad de residencia (en los seguros de decesos, puede haber variaciones dependiendo de la provincia en la que se resida).
  • Una vez hayamos estudiado si alguna de las coberturas que se nos ofrecen están ya recogidas en nuestro seguro de vida, o en algún otro seguro de accidentes que podamos haber suscrito con anterioridad, debemos proceder a seleccionar las coberturas que queremos incluir en nuestro seguro de decesos, ya que el número de coberturas incluidas también hará variar el precio de nuestra póliza.
  • Coche fúnebre.
  • El tipo de póliza elegida también puede hacer variar el coste total del seguro. Hay algunas más completas y otras más básicas. Además, dependiendo de la compañía de seguros elegida, también pueden oscilar los precios. Es importante que a la hora de calcular nuestro seguro de decesos hagamos una comparativa entre las diferentes compañías, ya que en ocasiones podemos encontrar diferencias que alcanzan hasta el 50% del precio.

Así, son dos los estudios que debemos hacer: el primero, el de las coberturas del resto de seguros que tengamos contratados, para evitar duplicarlas; el segundo, el de los precios y coberturas del seguro de decesos entre las distintas compañías del mercado.

Servicios funerarios asociados a un seguro de decesos

Las coberturas más comunes que se integran en un seguro de decesos son:

  • Féretro.
  • Tanatorio.
  • Acondicionamiento del cadáver.
  • Servicio de despedida (religioso o laico).
  • Flores o detalles decorativos.
  • Incineración o inhumación.
  • Gestiones de carácter administrativo o legal.
  • Asistencia médica y/o psicológica.
  • Asistencia en viaje o traslado del fallecido.

Además, tanto si estamos ante una cobertura de decesos dentro de cualquier otro seguro, como si estamos ante una póliza específica de decesos, muchas aseguradoras ofrecen coberturas premium como:

  • Cubrir la defunción ocasionada por accidente o voluntad propia.
  • Retrasar periodos de carencia.
  • Asistencia médica y familiar, sobre todo ante muertes inesperadas que han causado un grave impacto.
  • Conservación del ADN del difunto.
  • Servicios jurídicos específicos de cara a futuros problemas familiares relacionados con la herencia, o trámites similares.

También es conveniente saber que existen exclusiones a la aplicación de estos seguros de decesos. Entre otras podemos encontrar las siguientes:

  • Defunciones ocasionadas por fenómenos naturales catastróficos como, inundaciones o terremotos.
  • Defunciones que hayan sido fruto de conflictos bélicos o de la participación en motines o disturbios, que también suelen quedar fuera del ámbito de aplicación de estas pólizas.
  • Defunción por voluntad propia (hay compañías para las que el fallecimiento voluntario del asegurado cuenta como exclusión de la póliza).

Hay que estar al tanto también de los períodos de carencia, ya que es posible que deba pasar hasta un año desde la contratación hasta que la póliza del seguro de decesos pueda ser de aplicación, en particular cuando el fallecimiento se produce de manera voluntaria si así se recoge en la póliza de tu seguro de decesos.